Llegó el gran día, 25 de noviembre 2015. A la mañana, cuando me levanté, llegaba Eduardo de la calle con un ramo de rosas rojas y un beso. Qué más se puede pedir a los 75 años…!! El viernes 27, junto a familiares y amigos, organizó una fiesta inolvidable en O Hio, un lugar de ensueño, con el mar y la montaña de Galicia como paisaje. Eché de menos a muchos seres queridos, pero estaban todos en mi corazón
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Angeles Ruibal «Comida de cumpleaños en O Hio, parroquia de Cangas»
La cita era en el atrio de la Iglesia, donde se encuentra el Cruceiro de O Hio, uno de los más famosos del mundo. Comenzamos a festejar en una taberna cercana mientras iban llegando los invitados. Tomamos cerveza y un exquisito pulpo a la gallega. Al llegar al restaurante O Pereiro, nos esperaba una mesa llena de langostinos gigantes, empanada gallega, almejas a la marinera y rape con salsa de langostino y patatas riquísimas, que regamos con un magnífico vino albariño.
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Angeles Ruibal «Soplé la velita y cantamos todos juntos»
Con las tartas, el aguardiente y el licor café, llegó la música. Cantamos rancheras y boleros. También les dediqué María Soliña, muy apropiado teniendo abajo y a nuestra vista la ría de Aldán. Luego mi hija Graciela me cantó un alalá gallego dedicado a la nai, es decir a la madre, que me hizo llorar de emoción. Por todas estas cosas… vale la pena seguir cumpliendo años! El cariño que recibí quedará para siempre dentro de mi alma. Mi abrazo cariñoso a mi hermana Marisa, mi prima Mucha, Carmina y José Luis, Natalia y Dani, Marisé, Iago y a la familia Solla de O Pereiro que nos atendieron de maravillas.
¡Gracias a todos por tantos abrazos y regalos! Gracias Eduardo por hacerme tan feliz!!
Angeles Ruibal Pontevedra Galicia España